Con el objetivo de compartir experiencias y conocer la forma en que se desarrolla la minería en Canadá, dos profesionales del equipo de relaves de Sernageomin se reunieron con actores del ecosistema minero de ese país.
El coordinador del equipo de relaves de Sernageomin, Gullibert Novoa, y la ingeniera evaluadora de proyectos, Karina Monsalve, se reunieron en Ottawa con representantes del mundo de la academia y organismos de la industria minera canadiense.
Según explica Gullibert Novoa, las jornadas de trabajo les permitieron conocer distintos aspectos de los depósitos de relaves en Canadá, “con una realidad algo distinta a la chilena, especialmente saber cómo es la legislación de los estados, cómo manejan las empresas el diseño, la construcción, y la operación de los relaves mediante el uso de guías. Ellos tienen varias guías, y la legislación canadiense siempre tiende a señalar que se utilicen las mejores prácticas. Entregan lineamientos generales y en lo técnico se orientan más al uso de este tipo de documento. Es una realidad diferente a la de Chile, ya que en nuestro país todo apunta hacia el decreto 248, y allá dejan un poco más de libertad a los lineamientos”.
Novoa agrega que en Canadá las empresas mineras envían información a las autoridades sobre el estado de construcción y operación del depósito de relaves, los cuales verifican que se cumplan las mejores prácticas, como son las guías de la CDA o la MAC, “además, la Asociación Minera de Canadá también verifica que sus miembros estén utilizando las mejores prácticas. En Chile ocurre de forma diferente, donde el documento principal que debe seguir la empresa es la resolución del depósito de relaves, el cual da los parámetros que son fiscalizables por Sernageomin, e informa de manera trimestral acerca de su operación, mediante el formulario E-700 que es un formulario estándar”.
“Esta diferencia de interrelación de las empresas mineras, legisladores, asociaciones mineras, y comunidad, o ecosistema minero, no se da mucho en Chile, donde la diferencia entre un gran minero y pequeño productor es muy grande, y no existe una asociación minera única que autorregule a sus miembros", señaló el coordinador.
Por su parte, la ingeniera evaluadora de proyectos, Karina Monsalve, explica en relación con los relaves abandonados que “es uno de los pendientes que tenemos como país. En Canadá la situación es distinta, porque acá en Chile tenemos minería muy pequeña, mediana, y muy grande, en cambio allá la minería es homogénea, y en términos de tamaño nunca alcanza las dimensiones que tenemos acá en nuestro país. En lugares específicos había relaves abandonados, pero no generaban una mayor dificultad para ellos, es una realidad distinta, estaban emplazados en zonas más remotas donde no vive gente”.
En tanto el jefe de Departamento de Evaluación de Proyectos Mineros de Sernageomin, Jorge Vargas, recalca que las reuniones con los tres reguladores de Canadá, permitieron analizar las posibles líneas de investigación y cooperación que podemos desarrollar, “y son destacables los encuentros con la Universidad de Ottawa, que se pueden expandir incluso a universidades chilenas, sobre todo porque las reuniones fueron con actores clave en los temas de relaves de Canadá". (Fuente: ReporteMinero)