La versión 2023 de la Encuesta de Voces Mineras mostró cómo los encuestados observan la trayectoria que tendría la producción de Codelco durante este año y la cartera de inversiones mineras proyectada por Cochilco para la presente década.
Al consultárseles si la producción de Codelco se mantendrá, bajará o aumentará en 2023, el 11% de los encuestados opinó que ésta se mantendrá en los niveles actuales. Una minoría manifestó que la producción de la minera estatal subiría este ejercicio, con un leve incremento, en torno a un 5%.
Mientras un 65% de quienes contestaron la encuesta dijo estimar que Codelco reducirá su producción, al menos de 1,5 millones de toneladas este año. Varios coincidieron en situar la cifra en 1,45 millones de toneladas.
Entre los argumentos, se esgrimieron las dificultades reveladas por el Directorio de Codelco –en particular por su presidente, Máximo Pacheco– y el atraso en sus proyectos estructurales, además de la poca investigación desarrollada por la empresa.
Inversión minera
Ante la pregunta “¿Coincide o discrepa con la estimación de Cochilco de US$ 73.655 millones al 2031 para la inversión en minería?”, una amplia mayoría de los consultados dijo discrepar de dicha proyección. Entre otras razones, se mencionó la falta de certeza jurídica, las dificultades para obtener permisos, así como el escenario de mayores impuestos que generaría el nuevo royalty a la minería y la incertidumbre frente la nueva Constitución.
También se hizo referencia a las nuevas restricciones ambientales, a la escasez hídrica y a la falta de financiamiento que llevarían la inversión a una menor que la prevista. “La estimación (de Cochilco) incorpora proyectos con diferentes probabilidades de ejecución, por lo que es muy probable que sólo una fracción de ellos se realice finalmente”, se observó.
Una parte minoritaria de los encuestados dijo coincidir con la previsión de Cochilco sobre la cartera de inversiones mineras. Incluso algunos de ellos estimaron que ésta sería algo superior a la proyectada, argumentando que habría un repunte con posterioridad a la vigencia de la nueva Constitución y porque el alza en el precio del litio y muy probablemente en el del cobre impulsarían un incremento en las inversiones.
Asimismo, se planteó que durante los primeros dos años puede que la inversión sea menor a la presupuestada, pero la demanda mundial por minerales como el cobre incentivará nuevas inversiones. (Fuente: ReporteMinero)